Cuando me meto al ring, me siento amo y señor del lugar...

En una entrevista mano a mano con Ricardo “Kojac” Silva, actual campeón argentino de livianos, nos habló de todos y de todo. A sus 41 años sueña con salir campeón del mundo y saldar la cuota pendiente de su carrera. ( Creado el 18 de Septiembre del 2003



Kojac -¿cómo fueron tus comienzos en el boxeo?

El Boxeo me gusto siempre desde que era pibito, desde que era más chico que mis hijos. Me acuerdo que me sentaba debajo de la mesa y con mi viejo mirábamos las peleas del Luna Park. Las peleas de afuera. Cuando peleaba algún boxeador de antes, me acuerdo que tenía 5 o 6 años, yo le decía a mi viejo que algún día iba a pelear en el Madison Square Garden. Siempre me gusto. Mi viejo me enseño a boxear para defenderme nada más. A los 14 años me quiso llevar al Luna y mi vieja puso el grito en el cielo. No boxeo no, que es para locos, me decía...
Y a los 24 años me largué. le dije siempre a mi vieja: Mira vieja voy a hacer lo mismo que hice en la colimba. En la colimba hice paracaidismo. Cuando les dije que me había anotado para paracaidista me querían matar. Pero Vieja escúchame si tengo que pagar un aeroclub no tengo la plata, si tengo que comprarme un paracaídas no tengo la plata, si tengo que pagar el avión no tengo plata, aprovecho hago la colimba, lo hago gratis, me saco las ganas y listo.
Cuando empecé en el boxeo lo mismo, má peor que tenga 60 o 70 años y este diciendo podría haber hecho esto o aquello, entonces agarré y les dije lo voy a intentar. Si veo que es para mí sigo, si no es para mi te prometo que cuelgo mañana y acá me tenés.

-¿A quién tenías como ídolo?

Acá en Argentina, a Monzón y a Galíndez. Trato de conjugar en mi experiencia eso que tenía Monzón la frialdad. En los momentos que no te queda otra la hegemonía de Galíndez. Yo le enseño a los chicos hay que ser frío arriba del ring, por que no es negocio una por una. Una vez lo escuche a Julio Ernesto Vila y dijo una gran verdad: Boxeador que trabaja con una mano adelante, tiene una larga vida, boxeador que va al tome y traiga fue. Y es cierto, Monzón, Cleuson Clain, Leonar, Boxeadores que trabajaron largo, largo, fueron grandes figuras por años, mismo Roberto Durán que hizo una carrera bárbara, por que era un buen boxeador, Chavez también. El hombre que boxea con una mano adelante dibuja. Yo con la derecha no tenía fuerza para nada, pero a veces me doy cuenta que pego mas fuerte con esta mano, que con la zurda. Pero eso esta en ponerse las pilas. En trabajar en el gimnasio. Yo cuando no tenía fuerza con la mano de adelante, me ponía un guantín debajo de las axilas del brazo izquierdo y cuando se iban del gimnasio todos, yo me quedaba entrenando. Quería sacar fuerzas por que sabia que esa era la mano que me iba a dar de comer, por que de verdad esta es la mano con la que boxeo al tipo. Y la izquierda es para definir, para lastimar de alguna manera. La mano que mantiene a mi rival lejos, para que no me haga daño es la derecha.




-¿Te gusta el estilo de la Hiena Barrios?

No, no nada. Ojo lo han inflado. Como argentino Dios quiera que gane. Por que va a incentivar al boxeo argentino, va a incentivar a los muchachos. Y si gana me encantaría también, gane o pierda va a tener su buena bolsa por que le pagan 220.000 dólares y le quedaran 180 o 170, Dios quiera que lo sepa invertir. Así como es, una cañita voladora, te imaginas con esa cantidad de plata. A veces tiene esas salidas que a veces. Me acuerdo que en la pelea de Rio Gallegos llegó a la conferencia de prensa y me empezó a decir que era un viejo y que me iba a dar dos cachetazos e iba a mandar a dormir por que a los viejos hay que mandarlos a dormir temprano. Y un montón de cosas mas, que yo lo miraba y me reía. Hasta llegó a decir que el Kojac anda con la Biblia abajo del brazo y que era un pastor. Cuando terminó la conferencia de prensa dijo que invitaba a todos que vengan mañana con la entrada y con un ramo de flores, por que iban a presenciar el entierro del Cojak Silva. Lo miraba y decía: Que personaje.


Si no hubieses hecho boxeo -¿Te hubiera gustado hacer otro deporte?

Siempre me gusto el fútbol. Siempre me gusto jugar en el arco. Me encantó ser arquero. Yo de pibito atajaba y me acuerdo, cuando tenía 5 o 6 años, me creía que era Antonio Roma, jugábamos en el potrero. Después más grande me sentía Fillol. Después jugué los campeonatos de Evita.
Si tengo que elegir entre el fútbol y el boxeo, me quedo con el boxeo, por que me di cuenta que es más leal. Vos estas boxeando, terminaron los rounds y vas y te abrazas con tu compañero, le das un beso, lo felicitas, lo alentás. En el fútbol, noooo.
A mí siempre me gustó jugar al fútbol por diversión y cuando había campeonatos no me gustaba jugar por que se arrancaban las patas y en ese sentido soy calentón. Si yo a vos te paso y te hago un caño, vos no me colgués por que me levanto y te arranco la cabeza, entonces no hubiera servido para jugar a la pelota.
Cuando jugaba con los vagos y me hacían un gol, por que los goles más difíciles no me lo hacían y los goles más tonto por hacerme el gracioso me lo hacia. Y yo que hacia los aplaudía, me hacían un caño y los aplaudía, que vas a ser.... pero veo a los profesionales y si le hacen un caño le arrancan la canilla.
Hay que poner un poco más de lealtad, si me hizo un caño, en vez de colgarlo, lo agarro de la camiseta, lo agarro de un brazo, si igual te van a cobrar.
Por eso en el boxeo hay más lealtad, mira con la hiena que tanta bronca le tenia por todas las cosas que me decía antes de la pelea que tuvimos, que le gané, pero me dieron empate, me vino a pedir perdón, después de la pelea por todo lo que me había dicho. Mira que yo tenia ganas de fajarlo afuera del ring también, por todo lo que me dijo, me seguía por la calle, me insultaba en la calle, parecía esas mujeres despechadas y un loco, un loco.

-¿ Alguna vez te sentiste derrotado?

Si obvio, la primer pelea con Sicurella en el 2001 que Guzmán dijo que yo había metido cabeza y que me descuentan tres puntos. Igualmente yo estaba arriba por muchos puntos pero me la dieron perdida. Después la recupero con Sicurella en Moreno no me sentí derrotado y le gané con una pierna desgarrada. Me dolió mucho lo que hicieron en Moreno, porque agredieron constantemente a Lore (su esposa), a las melli (sus hijas), escupir a la gente que llevamos en el colectivo, nos amenazaron. Al arbitro le tiraron de todo cuando comenzó la pelea. Al fiscal Guillermo Mataza, cuando me colocaba el cinto le pegan con una lata de cerveza en la cabeza.
Me tuvieron que custodiar hasta el vestuario, me tiraron piedras y si no me cubría me las estampaban en la cara. Fue una cosa terrible tuvimos que salir custodiados hasta el colectivo, me sentí re mal porque fue un manoseo total. Pero eso estaba todo planeado. Me sentí frustrado y derrotado en esa pelea contra Sicurella. Y en esa me sentí derrotado, manoseado, violado era poco, sentía que no merecía esa actitud para conmigo, cuando yo nunca aproveche circunstancias, nunca aproveche para sacar mas plata. Yo no hice mal en el boxeo para que me paguen así. Ahí si me sentí derrotado.
Después en la pelea que me roban por el sudamericano con Villareal que me privaron de ser campeón mundial de los Walter Juniors, por que dos fulanos se vendieron por 200 mangos, 300 mangos, así sea por 1.000.000 de dólares. No es para joder a una persona que se mata entrenando, que la esta luchando contra todo, si yo la gane, gane y si me gana yo lo subo en andas, lo felicito loco. Si a mí el día de mañana me dan un titulo que no es mío, yo te juro que adelante que del que me lo dio, delante de las cámaras, me lo saco y se lo doy loco tomá.

-¿Es de instinto natural que el boxeador se levante cuando lo tiran?

Si. Es algo que esta dentro de uno. Significa no verse derrotado. Yo cuando peleé con Cruz me tiró tres veces y las tres veces me levanté. En la ultima ya no me levanto por que las piernas ya estaban dormidas, pero yo estaba lucido, yo le decía al arbitro que podía, pero las piernas no.
Las dos primeras veces me acuerdo me levanté, estaba un poco aturdido pero podía. Después ya no pude...

-¿Que sentís cuando subís al ring?

Es algo majestuoso. Cuando la gente te aplaude, es algo maravilloso. Me acuerdo cuando la otra vez fui a ver a mi concuñado que peleaba en el batallón de Los Polvorines y yo fui todo barbudo, la gente me conoció y me aplaudió. Eso para mi es lo máximo.
Cuando yo entro al ring, obvio, me preparo, se que tengo la pelea, estoy en el vestuario y estoy siempre con un poquito de ansiedad. Pero estoy tranquilo, por que sé lo que me preparé, sé que las cosas me van a salir bien, que te podes comer una piña y perder por KO, también lo sé.
Vos podés hacer mejor la pelea y sin embargo te embocan y perdes la pelea. Son las reglas del juego y tenés que asumirlas, pero cuando me metí al ring, te digo, no es por mandarme la parte, pero me siento amo y señor del lugar. Como que yo soy el dueño y nadie me va a sacar del lugar. Es mi lugar. Me siento como que soy el jefe y busco siempre las mejores estrategias. A veces no es que pongo cara de malo, sino que me concentro tanto que al tipo lo miro, lo miro tanto, que va a tener que bajar la mirada si o si.

¿Tiraste alguna vez la toalla?

Una vez sola le dije a mi técnico que me tirara la toalla. Fue cuando perdí el titulo argentino en el 92 contra Arévalo. Te comento como fue la estragia:
Yo venía de mandarme una pelea tremenda a doce round contra Fabián Tejeda en Canal 9. Me pega una. que me tapa este ojo completamente en el primer round.
Cuando me pegó pensé que me había pegado la cabeza contra la pared, no podía creer que el tipo pegue tan fuerte. Me dejó el ojo negro. En el cuarto round, el árbitro para la pelea, me manda para mi esquina, me revisa el médico, me tocó y me dijo que podía seguir. En el octavo round vuelve a parar la pelea, por la inflamación y ahí le rogué al arbitro para que siguiera la pelea. Entonces el arbitro me sorprende y me tapa el ojo que tenía sano en ese momento. Me dijo que número veía y yo le dije el 017. Entonces no se como el arbitro confió y dejo seguir la pelea. Hasta ese momento yo iba ganando la pelea, simplemente era la inflamación. Obviamente, Tejeda estaba cortado en el pómulo, las dos cejas, la nariz sangrando, tengo la foto que terminamos como los muertos vivos. Cuando suena la campana en el 12 round, por que antes el argentino era a 12 rounds, éramos dos muertos vivos. Bueno la cosa que retengo el argentino contra Tejeda, cuando todos pensaban que iba a perder.
Después vuelvo a pelear con Tejeda por el Sudamericano y cuando comienza el primer round, Tejeda me pone un derechazo que caí con todo sobre el ring, parecía esas alfombras de tigres, solamente me faltaba la boca abierta. Cuando me despabilo veo que el arbitro me estaba contado, entonces me levanto y sigo peleando. Después me mandé un peleón, pero igual le dieron ganada la pelea a él por la caída que tuve en ese round. Después de esa caída no me acuerdo nada de esa pelea, cuando vi después la pelea por televisión, vi todo lo que hice, entonces me di cuenta que yo peleé con el corazón y no con las manos.
Sobre el pucho de esa pelea me obligan a pelear contra Arévalo en Catamarca, yo peleé en Junio contra Tejeda, en Agosto la revancha y en octubre contra Arévalo en Catamarca. Yo me reconfié y fui un día antes de la pelea. Al día siguiente me dolía la cabeza, que mierda me había apunado. Para colmo yo me había peleado con mi técnico y fui con un hombre recomendado por Chaco Case, que me había entrenado en José C. Paz, que no sabia nada acerca de boxeo. El estadio de Catamarca estaba bote a bote, había casi 7000 personas, hacía un calor, 50 grados a la sombra y encima sale éste a matarme de entrada, lo boxee, lo boxee y en el quinto round lo pesqué, pero lo salvó el referí, por que cuando le empezó a contar sonó la campana. Yo ya estaba liquidado y en el séptimo round me pone una, me resbalo y caigo. En el décimo round, cuando termina ya no podía más y entonces le pedí a este muchacho que tirara la toalla, por que no daba más. Encima iba ganando en las tarjetas, pero no lo podía creer estaba destruido.

-¿A qué le tenes miedo?

No quiero ser soberbio, pero miedo no tengo. Al único que le tengo miedo es a Dios. Yo sé que si no hago bien las cosas chácate. Ni al diablo le tengo miedo. Sé que estoy tranquilo y con ganas de hacer muchas cosas. Imagínate que quiero hacer mi gimnasio acá, la casa arriba. Tengo varios proyectos. Uno de ellos, pedirle el predio que tienen los de Ferrovías, para hacer un ring al aire libre, pero lo quiero hacer bien por que sé lo que puede producir eso. Quiero que venga toda la gente a ver boxear a los chicos, a los hombres y también a las mujeres, que hoy, por hoy están peleando y muy bien.
Sé que esto va a motivar a todos los chicos y lo va a sacar de toda la pavada, de la droga, del alcohol. Que tengan un futuro en el boxeo como lo tuve yo. Antes yo iba del trabajo al boxeo y del boxeo a mi casa. Yo trabajé de carpintero, de albañil, de mozo, ayudante de cocina, de cartero, en el ferrocarril. Yo siempre le inculque a mis hijos trabajar, no robar. Yo veo a muchos pibes que trabajan y que no pueden ir al gimnasio...
Sabes que lindo cuando fui a representar a la Argentina a Miami, sabés como me agrandé. Fui el primer argentino en disputar en mi categoría un título mundial y se me escapó ahí. Se me escapo por falta de experiencia, me falto experiencia internacional. Le pelee de igual a igual.

-Después de retirarte del Boxeo ¿ Tenés pensado seguir vinculado al boxeo?

Pienso ante todo ser manager y entrenar a chicos. Pero quiero ser yo únicamente el técnico. No quiero tener intermediarios. La plata del boxeador es del boxeador, la plata del técnico es del técnico. Hay muchos intermediarios que llevan a los boxeadores a pelear por el pancho y la coca. Entonces, cuando hay intermediarios los que menos se llevan son los boxeadores.
Lo que pasa que tener promotores sirve, por que te colocan en el ranking mundial y tenés mas chances de títulos.

ESTA ES UNA ENTREVISTA QUE HICE EN 2ºAÑO, EN EL 2003